domingo, 25 de marzo de 2018

Acéptate como eres (O26)

Si sientes que algo está incompleto, eso es parte de la perfección. Eres perfectamente imperfecto. 

Osho




Habitar el cuerpo o entrar en la plenitud del tiempo: saborear el agua

Cuando nuestra unidad de medida es mecánica, experimentamos el tiempo como una cesta de la compra que ha de llenarse para poder sentirnos desbordantes de alegría. Tenemos un número de tareas que realizar durante el fin de semana y sabemos que no tendremos tiempo para hacerlas todas. Así pues, nos apresuramos, hacemos las cosas deprisa y corriendo y perdemos el sabor de la vida. 

John Briggs y F. David Peat

jueves, 15 de marzo de 2018

Autorespeto (O26)

El individuo no tiene que encajar con el modelo, el modelo tiene que encajar con el individuo. Mi respeto para el individuo es absoluto.


Osho 

jueves, 8 de marzo de 2018

La única salida



El hombre puede vivir sin ciencia, puede vivir sin pan, pero sin belleza no podría seguir viviendo, porque no habría nada más que hacer en el mundo. Todo el secreto está aquí, toda la historia está aquí


Dostoyevski

Crecer en la Belleza

¿Qué es la Belleza para un niño? Si la Belleza es la expresión de la bondad y de la verdad, lo Bello para un niño sería todo aquello que respeta la verdad de su naturaleza, su orden interior, sus ritmos, su inocencia, su proceso verdadero de aprendizaje, etc. El amor y el consuelo de su madre le llegan a través de su sonrisa, de su mirada cariñosa. El ritmo que le conviene le llega a través de la observación de la naturaleza. Descubre los colores a través de la Belleza de las flores del campo. Descubre el silencio a través del ruido intermitente del ruido en las hojas del bosque. Es importante que el niño experimente a través de lo cotidiano, de la verdad de la cosas, de la realidad, no de la virtualidad. 

Catherine L'Ecuyer

Ella recuerda: preservar los ritmos del ser para disfrutar de la existencia



La forma más directa y eficaz de matar el asombro de un niño es darle todo lo que quiere sin ni siquiera darle la oportunidad de desearlo. La falta de límites y el consumismo frenético en los niños destruyen el asombro porque así los niños dan todo por supuesto. Piensan que las cosas se comportan necesariamente como lo hacen, actitud contraria al asombro. O peor aún: piensan que las cosas y las personas deben comportarse siempre como ellos mismos quieren que lo hagan. 
Todas las cosas valiosas requieren tiempo. Un embarazo, una calabaza, una mariposa, la amistad, el amor. Si las esperamos, las deseamos, reconocemos el esfuerzo que han supuesto, las disfrutamos más. Nos asombramos ante su existencia.


Catherine L'Ecuyer

lunes, 5 de marzo de 2018